lunes, 31 de enero de 2011

JUAN VIVANCOS ANTÓN MIEMBRO DE LA ASOCIACIÓN DE ESCRITORES DE LA REGIÓN DE MURCIA




El escritor y Cronista Oficial de Cabezo de Torres, Juan Vivancos Antón, es desde el mes de enero de 2011 miembro de la Asociación de Escritores de la Región de Murcia.

Juan Vivancos Antón es autor de las obras publicadas:
“Cabezo de Torres, DE MÍ P’A TI y p’a que no s’olvide”.
Año 2003. Novela de costumbres murcianas.
“Romancero Apócrifo de El Principito”.
Año 2003. Cuento contra la drogadicción infantil.
“Cabezo de Torres una localidad con entidad propia”.
Año 2005. Magazine y tríptico.
“Cabezo de Torres. Historias de nuestro fútbol”.
Año 2005.
“El castillo, el albercón y el paisaje agrícola en Cabezo de Torres en el siglo XII”.
Año 2007. Lección Magistral pronunciada con motivo de su Investidura como Cronista Oficial de Cabezo de Torres.
“Cabezo de Torres 2006. Crónicas de un año extraordinario”.
Año 2007.
“El Duende de las letras”
Año 2010. Poemario.

Juan Vivancos Antón es coautor de los libros:
1.- “Caravaca y la aparición de la Stma. y Vera Cruz”. Actas del II Congreso de la Asociación de Cronistas Oficiales de la Región de Murcia Celebrado en Junio de 2006 en Caravaca de la Cruz.
2.- “Virgen de los Dolores. 80 aniversario de su llegada a El Raal” editado por Mercedes Barranco Sánchez en febrero de 2007 en El Raal.
3.- “Los Fajardo y el Marqués de los Vélez”. Actas del III Congreso de Cronistas Oficiales de la Región de Murcia celebrado en Abril de 2007 en Molina de Segura.
4.- “Murcia Palmo a Palmo IV. Crónicas de las ciudades y pueblos de la Región”. Publicado en enero de 2008.
5.- “Carnaval 2008. Cabezo de Torres”. Revista publicada en febrero de 2008.
6.- “Murcia Palmo a Palmo V. Crónicas de las ciudades y pueblos de la Región”. Publicado en agosto de 2010

Vivancos también ha colaborado en los libros aún no publicados.
“Actas del IV Congreso de la Asociación de Cronistas Oficiales de la Región de Murcia”. Celebrado en Noviembre de 2008 en Abarán.
“Murcia Palmo a Palmo VI. Crónicas de las ciudades y pueblos de la Región”.

Es autor de decenas de artículos publicados en diferentes medios de carácter local: libros de fiestas patronales, de peñas huertanas, de centros sociales… Ha intervenido en diferentes emisoras de radio locales y en cadenas de televisión autonómicas. Sus noticias y artículos de investigación se han publicado en los diarios “La Verdad” y “La Opinión”.

sábado, 29 de enero de 2011

JUAN VIVANCOS ANTÓN MIEMBRO DE L'AJUNTAERA




El escritor y Cronista Oficial de Cabezo de Torres, Juan Vivancos Antón, es desde el mes de enero de 2011 miembro de L’Ajuntaera pa la plática, l'esturrie y l'escarculle la llengua murciana.
L’Ajuntaera pa la plática, l'esturrie y l'escarculle la llengua murciana, tal qualo su mesmo mote menta, es una ansociación que tié como enza esturriar por quarsiquier lugar la llengua murciana, escarcullar los fontanares antannones, y la plática, pa poer surtir a quarsiquier presona que quiá trejinar en nuestra llengua.

sábado, 15 de enero de 2011

LA FIESTA AZUL DE SAN ANTÓN




La fiesta azul de san Antón.

Los que ya pasamos de los cuarenta años no podemos evitar la aguda punzada de la nostalgia al recordar que durante nuestra infancia, el 17 de enero S. Antonio Abad, se celebraba en Cabezo de Torres una de las fiestas más importantes del año. Esta festividad rivalizaba en popularidad con las fiestas patronales y con el mismísimo carnaval, hasta el punto que ese día cerraban los colegios, los bancos y los comercios. La mayoría de los vecinos no acudía a su trabajo en la huerta o a las fábricas de manufacturación de cítricos, pimentón o especias.
Desde primeras horas de la mañana, cientos de vecinos, cargados con cestas y capazas rebosantes de alimentos, se dirigían andando al monte que se denominaba de san Antón. Los ancianos, niños pequeños o personas con dificultad se trasladaban sobre carros y motocarros. Cuando la multitud llegaba al monte se reunía en grupos compuestos principalmente por familiares o amigos que preparaban el almuerzo que se dilataba hasta juntarse con la comida, que se alargaba hasta la merienda cuando el tibio sol de enero ya empezaba a desaparecer.
La mayor parte de la gente se dedicaba todo el día a ir de grupo en grupo saludando a los amigos y conocidos con quienes tal vez no habían tenido la oportunidad de coincidir en muchas semanas, quizá meses. Se formaban cuadrillas que tocaban y bailaban canciones de nuestro folclore tradicionales. Se asesaban chanzas y se recordaban anécdotas graciosas e historias más o menos reales que eran celebradas con palmas risas y largos tragos de la bota mientras todo ello iba quedando grabado en la mente de los jóvenes manteniendo la cadena de la tradición oral tan importante en nuestra cultura propia. Para los más pequeños se organizaban juegos tradicionales: caliche, palo, carrera sacos, lanzamiento huevos…Era un día de confraternidad, de hermandad, de fiesta en el más amplio sentido de la palabra.
Cuando ya el sol comenzaba a esconderse y rápidamente comenzaba a bajar la temperatura, tenía lugar el último acto de aquella fiesta. Como a una secreta orden, todos se afanaban en sacar los envoltorios de papel en donde celosamente guardaban un montoncillo de azulete en polvo que entonces era muy usado entre las mujeres a la hora de lavar las sábanas para proporcionarles esa característica blancura azulada. Todos se afanaban en intentar untar la cara de los más próximos con el azulete. A partir de ese momento, la fiesta de san Antón era una fiesta de color azul. Todo acababa siendo azul: las caras, las ropas, los utensilios, los vehículos, el mismo monte entero. En aquellos momentos en que las sombras de la noche se acercaban y el azul nos cubría, todos éramos casi iguales, El azulete era como un conjuro mágico que transformaba la propia individualidad en un colectivo impersonal. Era como un adelanto de lo que sucedería unas cuantas semanas más tarde con las máscaras en los días del carnaval.
Se desconoce cuando nació esta curiosa celebración de S. Antón pues en el pueblo no hay ninguna ermita dedicada al santo ni tampoco imagen o talla alguna del mismo. El origen del azulete también es un misterio pues no se realizaba en ningún pueblo de la comarca, si bien es cierto que en los últimos años algo parecido ocurre en alguna fiesta de La Algaida (Archena).
Cuando en la década de los años setenta de pasado siglo estos montes de san Antón fueron abancalados para plantar limoneros, y más tarde fueron divididos por la autovía A-7, con el lugar se perdió la fiesta ya que se ha señalado anteriormente ésta no tenía como objetivo una romería a una ermita en donde se venerase a san Antón. Durante algunos años se intentó mantener la fiesta en la pinada del parque de Los Polvorines de la vecina pedanía de Monteagudo. Pero rápidamente había perdido el interés y al final sólo ha quedado el nostálgico recuerdo de los mayores.
Hoy en día las dos peñas huertanas de Cabezo de Torres, La Picaza y El Cántaro, celebran el domingo más próximo a esta festividad una matanza tradicional del cerdo para mantener vivos y estrechar los lazos de convivencia de los socios y amigos. También el Centro Social de los Mayores de nuestra pedanía celebra una comida de hermandad en el citado domingo, teniendo lugar en los exteriores del centro que se llena de barbacoas o trasladándose en alguna ocasión al pinar del pantano de Santomera.


Juan Vivancos Antón
CRONISTA OFICIAL DE CABEZO DE TORRES

Artículo publicado el sábado día 15 de enero de 2011 en el diario La Opinión, en su sección el lugarico.

viernes, 7 de enero de 2011

ENTREVISTA A JUAN VIVANCOS ANTÓN EN EL DVD DEL CARNAVAL 2008 DE CABEZO DE TORRES



Video correspondiente al DVD del carnaval 2008 de Cabezo de Torres realizado por mi buen amigo Miguel Ángel Cánovas.

Juan Vivancos Antón
Cronista Oficial de Cabezo de Torres

jueves, 6 de enero de 2011

UN MILAGRO QUE CUMPLE 300 AÑOS





Un milagro que cumple 300 años


El 8 de agosto de 1706 el busto de la Virgen de los Dolores, en la casa de Francisco López Majuelo, lloró, dando así nombre a la patrona de Cabezo de Torres, la Virgen de las Lágrimas. De eso hace ya 300 años. Fue una criada de la casa quien observó que el rostro de la virgen estaba acongojado, su frente sudorosa, y que de sus ojos brotaban lágrimas.
Las tropas de Felipe V y algunas autoridades se acercaron para ver lo ocurrido: cuentan que las lágrimas eran tan abundantes que el agua salía de la urna de cristal en la que estaba metida, empapaba los manteles y escurría por el suelo. La imagen se encuentra hoy en la iglesia parroquial de Cabezo de Torres.

Información facilitada por Juan Vivancos Antón


Artículo publicado en el diario Crónica Sureste el día 8 de agosto de 2006
Juan Vivancos Antón, Cronista Oficial de Cabezo de Torres.

EL MILAGRO DE LAS LÁGRIMAS CUMPLE 300 AÑOS







El Milagro de las Lágrimas cumple 300 años.

Una criada descubrió en una casa de Cabezo de Torres el 8 de agosto de 1706, una imagen de la Virgen llorando.
J. VIVANCOS ANTÓN MURCIA

Hoy se cumple el 300 aniversario del milagro de Nuestra Señora de las Lágrimas, patrona de Cabezo de Torres. El título se le dio a un busto de la Virgen de los Dolores que lloró el 8 de agosto de 1706 en la casa de Francisco López Majuelo, del partido de Monteagudo.
Pasado el mediodía una criada subió a limpiar una habitación en donde había dos imágenes de la devoción familiar: Una de Jesús y la otra de la Virgen de los Dolores, de unos 35 centímetros de altura y protegidas por sendas urnas de cristal sobre unos manteles.
La criada observó que el rostro de la Virgen estaba acongojado, que tenía la frente sudorosa y que de los ojos brotaban gruesas lágrimas. Llena de espanto y temor bajó a llamar a los amos y efectivamente, todos vieron llorar la imagen. Acudieron los vecinos más cercanos y se fue corriendo la noticia por la huerta llegando más labradores para ver el prodigio.
Al día siguiente las tropas leales a Felipe V acamparon cerca de la casa. Enterados de lo sucedido acudieron los oficiales, soldados y capellanes del regimiento. Había también algunas personalidades llegadas desde Murcia y todos fueron testigos de que la Virgen sudaba tan abundantemente que el agua salía de la urna de cristal, empapaba los manteles y caía al suelo.
Por la noche llegó el obispo D. Luis Belluga. Cuando subió para ver la imagen, el llanto había cesado. El obispo se arrodilló, hizo oración y, luego sacó a la Virgen de la urna. La registró. Comprobó que era de yeso y quedó convencido de que era imposible una falsificación.
Belluga, preocupado por demostrar que aquello no era un engaño, mando llamar a un Provisor, a un Notario y al Fiscal del obispado que junto a varios peritos en yeso, barnices, pinturas, etc, examinaron el hecho durante dos días.
El Cabildo de Murcia escribió una carta al Obispo pidiéndole que la imagen de la Virgen fuese colocada en la Catedral.
El traslado de la imagen se hizo el día 11 por la noche en una solemne procesión. La colocaron en la capilla de San Andrés.
El obispado publicó una Pastoral conforme al Concilio de Trento y declaró que las lágrimas eran milagrosas. En la Pastoral habla de lo que ha visto, de los exámenes realizados, de los testigos y de la opinión de teólogos, concluyendo: “… declaramos por milagrosas dichas lágrimas, y sudor, y digna de veneración y culto las Sagradas Reliquias de los Manteles, donde corrió el sudor y las lágrimas.
El día 16 de octubre de 1994, volvió a su pueblo de Cabezo de Torres la venerada imagen milagrosa de Nuestra Seora de Las Lágrimas tras 288 años de estancia en la Catedral de Murcia. El pueblo celebró con júbilo su regreso, siendo entonces nuestro Obispo Javier Azagra Labiano, ejerciendo de Vicario General y Deán del Cabildo Antonio Martínez Muñoz y nuestro párroco arcipreste Pedro Lorente Martínez. Como colofón a tan digna efemérides, nuestro Obispo concedió a nuestra Parroquia un Año Jubilar Mariano.
La imagen milagrosa de Ntra. Sra. de Las Lágrimas se encuentra expuesta en la capilla del Sagrario de la Iglesia Parroquial de Cabezo de Torres cuando se cumple el III centenario del milagro.
El Obispo de nuestra Diócesis Juan Antonio Reig Pla, a petición del Párroco Arcipreste, Pedro Lorente Martínez, ha establecido y promulgado en el Templo Parroquial de Ntra. Sra. de Las Lágrimas de Cabezo de Torres, la celebración de “un Tiempo Jubilar Conmemorativo del III Centenario del Milagro de la Virgen de las Lágrimas”, entre el 30 de marzo de 2006 y el 30 de marzo de 2007, enriquecido con las indulgencias concedidas por el Santo Padre Benedicto XVI, según el certificado remitido por la Penitenciaría Apostólica y firmado por Jacobus Franciscus. Cardenal Stafford.

Juan Vivancos es Cronista Oficial de Cabezo de Torres.


En la imagen superior vemos al autor de este artículo frente a la Imagen Milagrosa de Ntra. Sra. de Las Lágrimas.


La profunda devoción del cardenal Belluga


J.V.A. MURCIA

Muchos son los documentos que demuestran que el milagro de la Virgen de las Lágrimas se cruzó en el camino del Obispo y lo marcó tan profundamente que no sudó en hacer de él bandera de su Episcopado. A partir de entonces Belluga no escatimaría esfuerzos desde el púlpito y fuera de él, para potenciar y hacer extensiva a los feligreses de su Diócesis la inquebrantable fe que tenía depositada en esta advocación mariana.
Tanto fue el amor del mitrado por los Siete Dolores de la Virgen que consagró toda la Diócesis a la advocación de la Virgen de los Dolores, e incorporó a sus escudo episcopal el corazón traspasado por siete espadas, en referencia a lo Dolores de María Santísima, reflejados en la Virgen de Las Lágrimas. Belluga no dejaba pasar ninguna oportunidad para dar cuenta del milagroso suceso y así se expresaba desde los púlpitos de nuestra Catedral, en el famoso Sermón de la Virgen de las Lágrimas: “Merecimos el año pasado ver sudor y derramar copiosas lágrimas a la Virgen, en el tiempo de mayor aflicción de estos reynos, para que por este medio persuadir a más a mi pueblo lo que su fe siempre ha creído”.
Así inicia Murcia su Siglo de Oro en el cual el inmortal Salzillo, estaría llamado a plasmar con su gubia la gran devoción de la diócesis: La virgen de los Dolores, imagen que recreó en numerosas ocasiones, llegando a rozar lo sublime en el encargo de La Dolorosa para la Cofradía de Nuestro Padre Jesús Nazareno, tallada en el año 1755.


Artículo publicado en el diario La Verdad el día 8 de agosto de 2006.
Juan Vivancos Antón, Cronista Oficial de Cabezo de Torres.





El dia 10 de agosto de 2006 en el diario La Verdad se recoge el éxito obtenido por el artículo anterior.

miércoles, 5 de enero de 2011

UNA DOLOROSA DE ANTONIO CARRIÓN VALVERDE


Dolorosa de Carrión Valverde conocida bajo la advocación de Ntra. Sra. de las Lágrimas, Patrona de Cabezo de Torres, con sus mejores galas.JUAN VIVANCOS



Dolorosa de Carrión Valverde conocida bajo la advocación de Ntra. Sra. de las Lágrimas, Patrona de Cabezo de Torres, con su vestimenta de diario. JUAN VIVANCOS

UNA DOLOROSA DE ANTONIO CARRIÓN VALVERDE.

Se desconoce el autor y la fecha en que llega a Cabezo de Torres la primera imagen de vestir de la Virgen de los Dolores, aunque está documentado que en el año 1706 había una pequeña ermita, dedicada a la Virgen de los Dolores,
En 1934 la Cofradía de la Virgen de los Dolores de Cabezo de Torres adquiría un trono para los desfiles procesionales de la patrona de la pedanía. El artista encargado de realizar el trabajo fue el imaginero D. Antonio Garrigós según recoge La Verdad el 20 de septiembre de 1934 y El Liberal del 23 del mismo mes.
Durante la Guerra Civil Española, todas las imágenes de la Iglesia Parroquial de Cabezo de Torres, incluida la de la Virgen de los Dolores, fueron quemadas. Así mismo no escaparon de las llamas los tronos y los archivos parroquiales.
Tras el conflicto será el imaginero murciano Antonio Carrión Valverde (1892-1983), artesano fiel al más puro estilo de Salzillo, quien realiza la imagen de vestir para la parroquia de esta pedanía que actualmente ocupa el camarín del altar mayor.
En el año 1965 se adquirió una nueva corona para la Virgen que luce en los momentos más solemnes. Es obra del orfebre Vicente Segura y es toda de plata con incrustaciones de piedras semipreciosas. Fue la “Comisión de Fiestas de 1965” quien quiso hacerle este regalo a la patrona el primer día en que se celebró el novenario de las fiestas de aquel año.
En su pecho, lleva la Virgen de los Dolores un corazón y un puñal que es un donativo del joyero local D. Francisco Fuster.
En lo que respecta al manto de mayor esplendor que luce la Virgen, éste se encargó en los talleres cartageneros de Consuelo Escámez Calderón. Se bendijo el Viernes de Dolores del año 1960. El manto es de terciopelo, color verde esmeralda oscuro; está bordado todo él en oro fino con incrustaciones de abundantes piedras semipreciosas. Lleva bordados en hilos de seda y mide un total de cinco metros de largo por cuatro metros de ancho. El manto ha estado expuesto en diversas ocasiones en las ciudades de Cartagena, Murcia y en la exposición internacional de artesanía de Munich (Alemania).
El trono de la Virgen es obra del escultor y tallista murciano Juan Lorente, también autor del altar mayor de la iglesia parroquial de esta pedanía. Las tallas son desmontables; mide dos metros y medio de largo y se estrenó en las fiestas de 1963 donado por una familia de este pueblo. El trono que pesa alrededor de 1000 Kg., dispone de luz eléctrica con baterías desde principios de los años 70 y fue restaurado en el año 1996, sobre todo la base del mismo, y se le cambiaron las varas.
El trono de la Virgen de los Dolores cuenta con 36 portaestantes, o costaleros, de los que 34 son necesarios para llevar el mismo. El traje de portaestante en Semana Santa, desde la década de los años 70, se compone de: capirote verde, con la cara descubierta, con tirantes de lazo laterales, y roseta de lazo detrás. Túnica corta verde, con solapas de chaqueta, camisa blanca, corbata negra, enaguas, medias con ligueros y esparteñas. Durante el desfile de Semana Santa, los portaestantes, obsequian con caramelos a los espectadores. Durante el desfile de Septiembre, el Cabo de Andas que es D. Juan Antonio Serrano Zapata, obsequia a las mujeres mayores que acuden a ver el desfile con una rosa blanca que lleva a los pies la Virgen.

Juan Vivancos Antón
CRONISTA OFICIAL DE CABEZO DE TORRES

Artículo publicado en el diario La Opinión el lunes día 3 de enero de 2011